Sunday, April 3, 2011

Paseo en lancha


Un bóxer en la marina de botes

Con planes de ir a dar un paseo en lancha para ver las aves anidando nos encaminamos a Marco Island en la costa del Golfo de México en el estado de Florida. Las islas próximas a esta ciudad son las primeras islas de las llamadas Diez Mil Islas que se encuentran al sur de la península de la Florida y es en estas islas donde muchas aves hacen sus nidos. Algunas de estas islas sólo podemos acercarnos a ellas por agua y el capitán de la lancha complació todos nuestros deseos para lograr bellas fotos.

El bóxer atento a su amo

De los detalles del paseo tratamos en Paseo en lancha en Marco Island en el blog de las Actualizaciones en Damisela; aquí vamos a hablar de una de las muchas sorpresas que nos llevamos en esta aventura por las aguas de la Florida. Esa sorpresa fue la cantidad de perros que inesperadamente cruzaron nuestro camino. Apenas llegamos a la marina, o embarcadero de lanchas, vimos un hermoso bóxer con un chaleco que decía “perro de servicio". Muy amistoso el amo del bóxer, y el perro demostrando gran obediencia todo el tiempo; una pareja muy carismática. Cuando le preguntamos al amo del perro que tipo de servicios eran a los que se referían el chaleco, el señor nos respondió que era ayudarle a él mantener el balance. Aparentemente el señor tenía problemas de cojera y el perro le servia para mantener su balance, o tal vez hayamos sido nosotros demasiado indiscretos en hacer tan tonta pregunta. Bueno, el bóxer era un bello ejemplar de su raza.

Caniche marinero

Apenas se fueron el bóxer y su amo, dirigimos la mirada a una de las lanchas y el caso paso de interesante a sorprendente. Un caniche, de los más pequeños, se encontraba ya muy dispuesto para salir a alta mar con sus amos. Tan simpático como intranquilo se paseaba por la lancha de una punta a la otra. Todo lo que sus amos tocaban, el pequeño caniche tenía que investigar con su chaleco salvavidas a su medida ya muy bien puesto. Y así salió esta lancha de la marina, con el señor y la señora que definitivamente eran sus amos, y el pequeño caniche marinero.

Caniche inspeccionándolo todo

Durante el paseo no vimos ningún otro perro y es que no nos acercamos a ninguna otra lancha lo suficiente para poder ver las personas, así que si eran acompañados de algún perro, no lo pudimos definir. Terminado el paseo fuimos a la ciudad de Naples a almorzar. Decidimos por un restaurante que se encuentra próximo a un canal donde usualmente hay mucho tráfico de lanchas. Sin lugar a dudas, fue un día de pura suerte. El camarero insistió en sentarnos en una mesa próxima al canal y la vista de las lanchas no pudo ser mejor. De nuevo vimos al menos dos lanchas más donde perros formaban parte de los pasajeros.

Familia con tres bulldog
Una familia en una de las lanchas que vimos pasar era acompañada por nada menos que tres bulldog. Todos iban tranquilitos disfrutando del paseo. Bien gracioso porque uno de los bulldog iba descansando al lado de la señora en la parte de atrás de la lancha, otro lo llevaban los muchachos y el tercero iba muy atento a todo al lado del señor al timón. Como que cada uno de los perros tenía a su amo preferido y tenía un carácter diferente y compatible con el amo de su preferencia. Y es que así son muchos perros.

Dos Staffordshire Bull Terrier en una lancha

Desde lo lejos vimos otra lancha donde dos Staffordshire Bull Terrier le ladraban a los pelícanos. Parece que los pelícanos ya están acostumbrados a esto porque ninguno se hizo al vuelo, ni siquiera se alejaron hadando de la lancha que les pasaba bien cerca a donde ellos estaban. Tan pronto la lancha, en su paseo por el canal, dejó a los pelícanos atrás los perros se tranquilizaron, y en eso llego nuestro almuerzo y ya daremos los detalles de las excelentes artes culinarias en Naples en otra entrada, aunque aun no sabemos en cual de los Blogs.